Si eres capaz de estimar los costes que vas a tener que asumir, si tienes el dinero o vas a ser capaz de conseguirlo –y de devolverlo–, y tienes más o menos una idea de tus precios, ya puedes comenzar a evaluar la viabilidad de tu idea de negocio. Empieza por analizar estos seis puntos:
1. Qué gastos tendrá tu empresa.
2. Gastos iniciales.
3. Fecha en la que el negocio comenzará a tener ingresos.
4. Gastos de proveedores.
5. Finalidad del dinero.
6. Capacidad para devolver la financiación y en qué plazos.